Alias «Otoniel». Fotografía Twitter Presidencia de Colombia.
El grupo paramilitar llamado por el gobierno como Clan del Golfo y autodenominado Autodefensas Gaitanistas de Colombia, AGC, se pronunció sobre la supuesta detención de Dairo Antonio Úsuga o alias «Otoniel». Por medio de un comunicado, el Estado Mayor del grupo, afirmó sentir preocupación y dolor por la captura de su principal líder.
Sin embargo, las AGC no dieron mayores detalles de la captura que ha sido cuestionada por varios sectores. Reconociendo la importancia del narcotraficante más buscado del país en dicha organización, el Clan del Golfo también señaló que evaluaran los recientes acontecimientos de manera grupal.
Para las víctimas alias «Otoniel» debe ser juzgado en Colombia
De acuerdo al ministro de Justicia, Wilson Ruiz, la extradición del narcotraficante se dará «tan pronto se reciba la formalización de la solicitud de extradición de la embajada de los EE. UU., se consolidará el expediente a través de la Dirección de Asuntos Internacionales del Ministerio, el cual será remitido a la Corte Suprema de Justicia para la emisión del respectivo concepto».
Ya esta intención ha sido calificada como un nuevo silenciamiento para las verdades que «Otoniel» podría aportar sobre los crímenes de las AGC, y ha provocado una avalancha de reacciones por parte de políticos, actores y las víctimas de este grupo paramilitar que sigue operando intacto en las regiones.
«Otoniel», tiene 120 ordenes de captura, seis condenas y una circular roja de la Interpol. Según Alirio Uribe la extradición sería una burla para las víctimas, quienes exigen verdad frente a los hechos perpetrados por el paramilitar.
Por su parte el Senador Iván Cepeda, en entrevista radial aseguró que es necesario que se abran caminos para una entrega de armas y una desmovilización total de los grupos, camino que ha sido cerrado con el gobierno de Iván Duque.
En dos comunicados las víctimas aseguran qué de acuerdo a su experiencia en los territorios en los que habitan las AGC, tendrían una responsabilidad en delitos cómo el control territorial y han obligado a las comunidades a sembrar cultivos de uso ilícito entre otros muchos delitos que se han cometido con la complicidad de las fuerzas militares y de policía, en claras violaciones de los Derechos Humanos y del Derecho Internacional Humanitario.
En concreto están solicitando a los organismos competentes, que se detenga la extradición de úsuga, para que pueda comparecer ante instancias nacionales dar garantía a los derechos de las víctimas a la verdad la justicia y la reparación integral.
Además, las más de 120 comunidades y procesos que habitan muchos territorios en los que las AGC siguen ejerciendo control territorial y que hacen parte del proceso SOMOS GÉNESIS, aseguran que si el jefe paramilitar tiene asuntos pendientes con la justicia de Estados Unidos por delitos relacionados con el narcotráfico se deberían establecer mecanismos para que responda por dichos crímenes pero desde Colombia dado que los derechos de las víctimas deberían tener prevalencia.
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