Foto: zona cero
La situación que se presentó en la localidad de suba este lunes 29 de junio en Bogotá refleja lo que ha sido la actitud del gobierno y de la policía frente a los dos meses de manifestaciones en todo el país.
La agresión contra periodistas, contra manifestantes en estado de indefensión, la estigmatización y la amenaza han sido las constantes en el paro nacional y también han sido constantemente denunciadas por organizaciones de derechos humanos.
Sin embargo, que esta vez las víctimas hayan sido periodistas de RCN, de Blu radio y de una agencia internacional, así como un niña son el agravante para que nuevamente la indignación ciudadana siga creciendo.
Según la información reportada, varios periodistas lograron registrar el momento en que al menos seis integrantes del ESMAD, golpearon brutalmente a un niño que por la acción de los gases había caído con su bicicleta en el sector de las manifestaciones.
Después de ello y ante el reclamo de los periodistas, que tenían plena identificación como prensa, los mismos integrantes del ESMAD arremetieron contra ellos y ellas, golpeando, insultando y amenazando a todos aquellos que les reclamaron por la agresión contra el menor de edad.
De este tipo de agresiones también han sido víctimas dos integrantes del equipo de Contagio Radio, que a pesar de portar todos los distintivos necesarios, fueron impactados por bombas aturdidoras lanzadas por el ESMAD.
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Son 257 agresiones contra la prensa en dos meses de Paro Nacional
Según la Fundación para la Libertad de Prensa, FLIP, las agresiones en contra de periodistas superan la cifra de 253 sin que hasta el momento se conozcan resultados de las investigaciones o sanciones más allá de las declaraciones públicas realizadas por la alcaldesa de Bogotá la fiscalía o la presidencia.
Según la FLIP durante estos dos meses de Paro Nacional los periodistas han sufrido 100 agresiones, físicas 44 amenazas, 26 obstrucciones al trabajo periodístico, 14 robos o eliminación de material, 17 hostigamientos y 11 detenciones ilegales entre otras agresiones.
Por ello, esta organización, así como periodistas de diversos medios de información alternativa, comunitaria y popular, así como medios empresariales hicieron un llamado para que se respete el trabajo de estas personas y se garantice el derecho a la información que tiene la ciudadanía.
Adicionalmente, la exigencia creciente es a que no se estigmatice el trabajo de periodistas y defensores de derechos humanos, cómo ha sucedido hasta el momento, dado que este tipo de señalamientos afecta gravemente a la democracia y debilita las posibilidades el ejercicio de los derechos humanos integralmente comprendidos.
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