Foto: @AttorneyCrump
Este fin de semana cientos de personas salieron a protestar en el estado de Wisconsin, Estados Unidos, después de que la policía disparara repetidas veces contra un hombre negro que según fuentes, intentaba detener una pelea entre dos mujeres.
El hecho se dio a conocer por medio de un video publicado en internet y en el que se muestra al hombre, identificado como Jacob Black recibiendo varios disparos en la espalda mientras intenta entrar a su vehículo en la ciudad de Kenosha.
Los habitantes de la ciudad marcharon hacia la sede de la policía el domingo por la noche. Durante las protestas, hubo incendios a vehículos y los manifestantes gritaron «No retrocederemos».
A raíz de estas protestas, las autoridades de la ciudad declararon un toque de queda nocturno de emergencia y se reportó que utilizaron gases lacrimógenos para tratar de dispersar a los manifestantes que permanecieron en las calles.
Tony Evers, gobernador de Wisconsin, expresó en su cuenta de twitter que rechazaba el uso excesivo de la fuerza, añadiendo que apoya a quienes siguen exigiendo justicia. (Le puede interesar: Nace Asociación Colombiana de Economias Negras)
Por su parte, el Departamento de Policía de Kenosha dijo que los agentes involucrados habían estado respondiendo a un «incidente doméstico». Sin embargo, no dieron detalles sobre lo que provocó este accionar por parte de los agentes, cuyos nombres aún no se conocen oficialmente.
Un abogado de derechos civiles, encargado del caso de Blake confirmó en su cuenta de twitter que tres de los hijos de Jacob Blake estaban en el auto cuando le dispararon y añadió que este suceso podría dejarlos traumatizados para siempre.
Las protestas no solo fueron en las calles
Al conocerse este suceso, miles de personas firmaron una petición en la que pedían que los agentes que estuvieron involucrados en este suceso, fueran acusados. (Le puede interesar:Así es el movimiento antirracista que conocimos después del asesinato de George Floyd)
Igualmente, la indignación y el rechazo no han parado de mostrarse a través de las redes sociales y el lema Black Lives Matter (Las vidas negras también importan) vuelve a estar en ruedo.
Miles de personas vuelven a cuestionar el uso de la fuerza por parte de agentes y los hechos de racismo que se siguen presentado en el país norteamericano. Además, continúan exigiendo al gobierno, tomar medidas en cuanto a los métodos de violencia usados por la policía.