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“Expresamos nuestra profunda preocupación por la creciente violencia política e injerencia en las elecciones presidenciales del 29 de mayo en Colombia”. Este es el íncipit de una carta pública procedente de Italia y firmada por varios congresistas, organizaciones sociales y de cooperación internacional de ese país, que manifestaron su aprensión frente a las condiciones de inseguridad en las que se está llegando a las próximas elecciones presidenciales.
La misiva hace referencia a los recientes episodios ocurridos en Colombia, desde las amenazas de muerte y el plan de atendado contra el candidato del Pacto Histórico Gustavo Petro, a las intimidaciones y la “campaña de discriminación” contra su fórmula vicepresidencial Francia Márquez. “El ser mujer, negra y ecologista es condición suficiente para ser expuesta al escarnio público”.
Desde Italia se subraya como la violencia en Colombia no está dirigida únicamente contra los políticos, pues representa una “constante”, como demuestran los “más de 50 líderes sociales, sindicalistas, representantes de comunidades indígenas y movimientos campesinos y ambientalistas” asesinados en este 2022, y el paro armado declarado por “los grupos narcoparamilitares de las Autodefensas Gaitanistas de Colombia” que ha dejado a numerosas comunidades en el terror, poniendo en riesgo el proceso democrático.
Un hecho de violencia, en particular, vincula Italia con Colombia: el asesinato del funcionario italiano de las Naciones Unidas Mario Paciolla, ejecutado en San Vicente del Caguán, departamento de Caquetá, en julio de 2020, y sobre cuya muerte no habido aún esclarecimientos suficientes.
“Estos hechos requieren mayor vigilancia, control y transparencia en las elecciones presidenciales en Colombia. Desde hace décadas el pueblo colombiano pide Paz, Justicia Social y Dignidad. Nos sumamos a nuestra solidaridad con su lucha por garantizar un proceso democrático libre y pacífico”.
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