Luego de 6 jornadas de audiencia, en las que el fiscal Gabriel Jaimes defendió su solicitud de preclusión de la investigación en contra de el ciudadano Álvaro Uribe Vélez, la conclusión era la esperada pero además, solicitó que de nuevo se investigue a Iván Cepeda, negando así la génesis de este caso en 2018.
Según algunos analistas consultados por este medio, con esta decisión la fiscalía enfrenta y desestima lo actuado por la corte suprema de justicia en dos sentidos primero actúa sobre testigos que habían permitido a la Corte formular la imputación de cargos contra Álvaro Uribe Vélez; y segundo solicita de nuevo que se investigué al senador Iván Cepeda por fraude procesal y soborno a testigos lo cual ya había sido objeto de análisis de la propia Corte.
Aunque la decisión de la fiscalía era la esperada, lo que si sobrepasa los análisis es que la fiscalía descalifique las acciones de la Corte Suprema de Justicia y traté de deslegitimar lo dicho por los testigos en lugar de actuar como el ente acusador y buscar las pruebas que sí determinarían la responsabilidad de Uribe Vélez en los delitos.
Fiscalía actuó de acuerdo a lo esperado pero no de acuerdo a sus funciones
Ya en diversas declaraciones y análisis se había dado por hecho que el fiscal Gabriel Jaimes delegado de Francisco Barbosa estaba actuando como si fuese la defensa de Álvaro Uribe, lo que ponía en duda la objetividad del ente acusador para actuar en procesos en los que integrantes del partido de gobierno y en este caso su líder resultan implicados.
Vale la pena recordar qué en 2018 se dio la Génesis de este proceso pues la corte suprema de justicia al investigar a Iván Cepeda encontró que el posible responsable de los delitos de fraude procesal y soborno a testigos era Uribe Vélez, denunciante, Iván cepeda el denunciado.
Luego de la orden de arresto en contra de Álvaro Uribe, en Agosto de 2020, la jugada del expresidente fue renunciar al congreso para evitar que el juicio continuará en manos de la corte y pasará a la fiscalía en dónde podría encontrar una actuación más favorable a sus intereses y menos estricta.
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