Fotografía Colombia Informa.
A partir de 1993, cuando la Asamblea General de las Naciones Unidas lo estableció, el 3 de mayo se celebra el Dia Mundial de la Libertad de Prensa. La ONG Reporteros Sin Fronteras reveló la Clasificación Mundial de la Libertad de Prensa 2022 en la que se evalúan el derecho a la información, la libre expresión de periodistas y la censura en 180 países.
En el análisis se observó un aumento general de la censura en América Latina después de la coyuntura pandémica. Eso no obstante, algunas naciones del continente lucen por las condiciones de seguridad brindadas para el ejercicio del periodismo.
Es el caso de países como Argentina (en la posición 29 en la lista), República Dominicana (30) y Uruguay (44). Resultados que sin embargo no son comparables con las condiciones de los derechos de libertad de expresión y de prensa del país latinoamericano que más alto figura en la clasificación, Costa Rica (8), donde “los periodistas pueden ejercer el oficio sin obstáculos, sin hostigamiento, ni amenazas, ni vigilancia, ni encarcelaciones por parte del gobierno”.
Libertad de prensa en Colombia
Colombia figura en la posición 145 y es caracterizado como “uno de los países más peligrosos del continente para los periodistas”. Los ataques contra los que ejercen la profesión tienen una natura sistemática, así como el acoso y las amenazas.
Detrás de Colombia los países latinoamericanos presentes son Venezuela (159), Nicaragua (160) y Cuba (173), estados en donde el orden democrático es seriamente cuestionado por la comunidad internacional.
La Fundación para la Libertad de Prensa – FLIP señaló que en los últimos 5 años fueron 7 los periodistas asesinados en Colombia, lo que lo convierte en el segundo país al mundo en esta estadística tras México, a pesar de que figure antes que Colombia en la clasificación de libertad de prensa (127).
La FLIP además denuncia que “la falta de respuesta estatal frente a estos ataques es similar a la que se vive en gran parte de la región, que también ha tenido un año lamentable, con récord de periodistas asesinados, encarcelados, medios allanados y legislaciones restrictivas. Lamentablemente esta situación de vulnerabilidad se acentúa durante los procesos electorales”.
Por otro lado, la confianza de la ciudadanía en la prensa está registrando en los últimos años niveles muy bajos, hay de hecho “creciente escepticismo sobre la veracidad del contenido que reciben las audiencias”.
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