Carlos Guillermo Ospina. Fotografía CEV.
La renuncia del militar en retiro, Carlos Guillermo Ospina, como comisionado de la CEV, nuevamente se usó para poner en cuestionamiento el Acuerdo de Paz suscrito con las FARC-EP en noviembre de 2016 y las instituciones creadas como fruto de dicho acuerdo, entre ellas la Comisión para el Esclarecimiento de la Verdad.
Ospina, argumentó que su renuncia se da porque presuntamente en la Comisión «no hay espacio para él” y que incluso busca afectar el trabajo interno. «Dentro de la Comisión hay un señalamiento, una estigmatización, sobre mi persona. Han dicho que yo soy parte de un complot, que yo entré a la Comisión a hacer inteligencia, que yo quiero dañarla y que estoy haciendo un informe que es un contrainforme, porque mi verdad es diferente a la que presentan ellos”, agregó el militar en un medio local.
El excomisionado, también señaló que se le impidió contar con un equipo conformado por militares, mientras que a “personas que han estado en grupos armados, tanto en la parte política como armada” no se les objetó su vinculación al proceso que lleva la Comisión. De igual forma, Ospina aseguró que con el Informe Final se intentaría interferir en la política, concretamente en el proceso electoral presidencial. “Pensaría que sí por una razón sencilla: cuando la responsabilidad de un conflicto armado es netamente del Estado y de sus fuerzas militares, pero se deja a parte a los otros actores de la convivencia, se le está dando razón política a un sector”, expresó.
Ante las afirmaciones del excomisionado, la CEV en un comunicado público lamentó la renuncia de Ospina y afirmó que se le brindaron todas las garantías para desempeñar su cargo “en términos del reglamento y funcionamiento internos, procedimientos y recursos de todo tipo para el desarrollo de las funciones que le fueron asignadas como comisionado”.
La Comisión también reconoció que “la renuncia del comisionado Ospina se da en un momento crucial cuando la Comisión está concentrada en los últimos dos meses de preparación del Informe Final y los y las comisionadas estamos dedicados a la reflexión, al diálogo en debates profundos y enriquecedores, y a valorar la importancia de las diversas posiciones para el esclarecimiento de la verdad”.
Como era de esperarse, la Asociación Colombiana de Oficiales en Retiro de las Fuerzas Militares (ACORE), por medio de su presidente, John Marulanda, respaldó la renuncia, y deslegitimó el informe que se presentará a finales de junio.
Las tensiones internas en la CEV vienen de tiempo atrás y no son las únicas
Analistas como Camilo de las Casas, indican que son normales las tensiones al intentar lograr una interpretación completa de la complejidad del conflicto armado en Colombia, y más aún cuando ese conflicto sigue afectando cientos de territorios y a sus habitantes.
También se afirma que, seguramente habrán asuntos muy subjetivos que se mezclan con los objetivos y es evidente que reconocer la responsabilidad del Estado en crímenes de lesa humanidad, en la generación de violencia o como responsable del paramilitarismo, generará reacciones, o que se plantee un ejercicio de derecho a la rebelión, y en este se hayan cometido gravísimas infracciones al Derecho Internacional (DIH) en muchas de las actuaciones a las guerrillas que generarán debate.
Finalmente, la CEV recordó el trabajo realizado, particularmente con militares, en relación a la contribución de verdad.
“En total, la CEV ha recibido 158 documentos correspondientes a casos e informes entregados por la Fuerza Pública, desde el año 2018 hasta lo corrido de 2022. De estos, 14 fueron entregados por el Comando General de las Fuerzas Militares, 107 por el Ejército Nacional de Colombia, 6 por la Fuerza Aérea Colombiana,12 por la Armada de Colombia y 19 por la Policía Nacional. Así́ mismo, entre 2020 y hasta la fecha, la Comisión de la Verdad ha realizado un total de 66 espacios de escucha coordinados y/o acompañados desde el nivel nacional, de los cuales 20 han involucrado la participación de las Fuerzas Militares y de Policía, organizaciones de exintegrantes de la fuerza pública y organizaciones de víctimas que pertenecieron a la Fuerza Pública. Recientemente la Comisión recibió, de manos del Presidente de la República, el informe Aporte a la Verdad, Contexto de la Fuerza Pública para la Memoria Histórica”.
CEV.
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