Carlos Fernando Ramos Sánchez es el cuarto excombatiente asesinado en Colombia durante este año 2022. Fotografía ilustrativa de El Espectador.
Este 10 de febrero se reportó un nuevo crimen en contra de los y las excombatientes que se acogieron al Acuerdo de Paz en 2016. Está vez la victima fue el firmante de paz, Carlos Fernando Ramos Sánchez, quien fue asesinado por sicarios en Leticia, Amazonas.
Carlos Fernando Ramos Sanchez, conocido como Nilson, fue asesinado con arma de fuego mientras se movilizaba en una motocicleta en medio de la vía pública. De acuerdo a la congresista Victoria Sandino, el excombatiente se encontraba en proceso de reincorporación en el ETCR Oscar Mondragón en Miravalle, Caquetá.
La senadora también señaló que el hombre deja a una niña huerfana y es el segundo excombatiente asesinado en este 2022, sin embargo, la cifras del registro del Instituto de Estudios para el Desarrollo y la Paz, INDEPAZ, indican que es las cuarta víctima mortal de este nuevo año y el número 303 desde la firma del Acuerdo de Paz entre la entonces guerrilla de las FARC-EP y el Gobierno Nacional.
La Defensoría del Pueblo, emitió la Alerta Temprana Estructural 002 del 2021 en la que señala que el «escenario de riesgo se configura, principalmente, a partir del accionar de la facción disidente del Frente Primero de la antigua FARC-EP, caracterizado por el dominio y control del territorio a lo largo de la cuenca del río Putumayo y hasta la subregión del Trapecio Amazónico y por la presencia del grupo de crimen organizado Sinaloa-La Mafia en mayor medida en la subregión del Eje Putumayo, y que se acompaña del accionar de grupos delincuenciales de menor envergadura».
«Por su parte, en la subregión del Trapecio Amazónico, conformada por los 2 únicos municipios del departamento (Leticia y Puerto Nariño), se ha acrecentado la comisión de homicidios y muertes violentas. Se presume que algunos de estos hechos pueden estar relacionados con las dinámicas de las economías ilegales, pero otros responden a los dispositivos de control impuestos por los actores armados ilegales en términos de señalamientos contra líderes o autoridades étnicas que transgreden el «código de conducta» impuesto. La situación es especialmente gravosa en Leticia por la dinámica de violencia de su vecino municipio de Tabatinga en el Brasil».
Afirmó en la AT 002 de 2021 la Defensoría del Pueblo.
INDEPAZ, también señaló que en la región hay presencia del Frente 43 del Bloque Suroriental y Comandos Bolivarianos de la Frontera de la Segunda Marquetalia. Por ahora se desconocen quiénes serían los responsables del crimen.
Otras noticias:
Se confirma el asesinato del líder indígena Luis Chamapuro
Riesgo electoral 2022: Antioquia, el departamento con mayor peligro de corrupción electoral
