Hoy se conmemora un año de la masacre del Alto Remanso un operativo militar, supuestamente, contra los ‘Comandos de Frontera’ en la vereda Alto Remanso, en Puerto Leguízamo, Putumayo. Las comunidades hacen un acto conmemorativo en el lugar de los hechos y desde el Congreso de la República un acto simbólico. La Fiscalía investiga a seis generales, pero aún no hay claridad sobre los hechos.
Por Carolina Toro Leyva
Bogotá. El 28 de marzo de 2021, a las 7:30 de la mañana, el Ejército inició un operativo militar, supuestamente, contra los ‘Comandos de Frontera’, también conocidos como ‘Los Sinaloa’, en la vereda Alto Remanso, en Puerto Leguízamo, Putumayo. El objetivo era capturar a dos de sus integrantes, conocidos con los alias ‘Bruno’ y ‘Managua’, encargados del tráfico y la comercialización de drogas. En el lugar de los hechos los pobladores realizaban un bazar para recaudar fondos para sus actividades comunitarias.
Entre las 11 víctimas mortales que dejó el operativo estarían Pablo Panduro Coquinche, Gobernador Indígena Kichwa, del resguardo Bajo Remanso; el presidente de la Junta de Acción Comunal de la vereda, Divier Hernández; su esposa, Ana María Sarrias Barrera; Brayan Santiago Pama Pianda (menor de edad); Rubén Peña; Óscar Oliva; Luis Guerrero; Enuar Ojeda; José Peña; Alexander Peña y Jhon Jairo Silva. Este último era firmante de Paz, según confirmó la Agencia Nacional de Reincorporación.
Según la reconstrucción periodística, hecha por El Espectador, la revista Cambio y el portal Vóragine, los testimonios recogidos de los habitantes de esa comunidad afirman que los militares se identificaron como guerrilleros, por lo que la comunidad creyó que eran del frente Carolina Ramírez de las disidencias para atacar a un supuesto grupo de los Comandos de la Frontera. Además, que los hombres venían vestidos de negro y que los cuerpos de las víctimas fueron movidos por el personal militar y estuvieron bajo su custodia por varias horas.
Así mismo, no coinciden las versiones y comunicados del Ministerio de Defensa y de la Fiscalía. Aunque el Ministerio de Defensa aseguró en una rueda de prensa que el operativo se había realizado en conjunto con la Fiscalía, el ente investigador confirmó que tuvo conocimiento de los hechos alrededor de las dos de la tarde, siete horas después de los combates. Además, el ministerio dice que hubo retenidos y la Fiscalía contradice esa versión.
A pesar de la complejidad de este caso, la Fiscalía arribó hasta el lugar de los hechos para comenzar las pesquisas judiciales y la toma de testimonios el 1 de abril, cuatro días después del operativo. Para entonces, la Mesa Territorial de Garantías de Putumayo, conformada por más de 10 organizaciones de derechos humanos, y algunos medios de comunicación ya habían llegado a Puerto Asís.
En su momento el general Juan Carlos Correa, comandante de la División de Aviación Asalto Aéreo del Ejército, aseguró que se trataba de un combate entre las Fuerzas Militares y las disidencias de las Farc de Comandos de la Frontera. “La operación legítima se hizo contra Carlos Emilio Loaiza Quiñónez, alias ‘Bruno’, jefe de finanzas del frente 48 de las disidencias y que hace parte de las organizaciones criminales que trafican cocaína en la frontera con Ecuador”, aseguró el oficial. Sin embargo, él no fue abatido allí, ni fue capturado.
Por su parte, David Melo Cruz, representante jurídico de las víctimas del operativo militar e integrante de la Fundación Liderazgo y Paz del Putumayo, asegura que dará la batalla judicial para probar lo que ellos denominan habría sido una “masacre”. Por su parte la Organización de los Pueblos Indígenas de la Amazonía, OPIAC, dijo que este es un caso de ejecuciones extrajudiciales, denominadas comúnmente, falsos positivos.
La Fiscalía asegura que está avanzando en el caso, en cual están siendo investigados 6 generales, pero hay muchos interrogantes: ¿Hay pruebas de que las 11 personas muertas pertenecían a las disidencias de las Farc?, ¿Por qué los militares llegaron vestidos de negro, sin insignias oficiales y presentándose como guerrilleros?, ¿Cuántos civiles murieron en la operación?, ¿por qué se movieron los cuerpos de los civiles?