Durante la audiencia de finalización de la preclusión del caso contra Álvaro Uribe por los delitos de fraude procesal y manipulación de testigos, la jueza 29 de Bogotá habría decidido que hay elementos suficientes para continuar con el siguiente paso, es decir que se iniciaría un juicio en el que la fiscalía está obligada a presentar un pliego de cargos en los próximos tres meses.
Según la juez, la fiscalía omitió varios testimonios, evitó llamar a algunos testigos y tuvo una fundamentación débil de su solicitud. Además, los abogados de las víctimas habían manifestado que la audiencia de preclusión se había convertido, de nuevo, en una serie intentos de la fiscalía por demeritar los testimonios contra Uribe, como si se tratara de un nuevo juicio contra los testigos.
Iván Cepeda, Senador del Polo Democrático y una de las víctimas por cuyas denuncias se inició este proceso, aseguró que «La Jueza 28 penal de conocimiento de Bogotá, Carmen Helena Ortiz, decidió negar solicitud del fiscal Jaimes de precluir el proceso en contra el imputado Álvaro Uribe. Habrá juicio. Por primera vez, un expresidente de la República asumirá su responsabilidad penal ante un juez.»
Respecto al delito de fraude procesal, se continúa en su evaluación por parte del juzgado aunque ya se ha señalado que, como en el caso del delito de soborno, los rrgumentos de Fiscalía fueron débiles e inconsistentes. Fiscalía en 4 meses pretendió desconocer de fondo el trabajo en derecho de la Corte Suprema de Justicia.
Como era de esperarse en un juicio de interés nacional, las reacciones no se hicieron esperar y han sido miles las opiniones de diversos sectores políticos y sociales que se han emitido al respecto. Sin embargo, muchas de ellas coinciden en señalar que la labor de la Fiscalía y la Procuraduría se limitaron a intentar perseguir a los testigos en lugar de señalar los delitos cometidos contra las víctimas.
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