Este viernes, en medio de la sorpresa de las familias de las víctimas y la población en proceso de reincorporación, varias de las personas procesadas por el asesinato de Dimar Torres, ex integrante de las FARC, fueron dejadas en libertad por «vencimiento de términos» es decir que la Fiscalía y los jueces no actuaron eficazmente para impartir justicia y evitar que la impunidad sea otra excusa para que la masacre continúe.
El juzgado 8 de control de garantías hizo una suma que derivó en que el coronel retirado Jorge Armando Pérez Amézquita, y los uniformados Cristian David Casilimas, Yorman Alexánder Buriticá y William Alarcón recuperen su libertad mientras afrontan un juicio por el delito de homicidio en persona protegida, todo ello a pesar de las múltiples evidencias que pesan en contra de los uniformados.
Diego Martínez, defensor de la familia de la víctima, asegura que lo que sucede en el caso de Dimar Torres es de extrema preocupación porque allana el camino para que los crímenes de las personas en proceso de reincorporación queden en la impunidad. En este caso hay evidencia material, testimonial que es irrefutable y que explica, sin duda, la responsabilidad del ejército.
“No hay que capturarlo, hay que matarlo. No aguanta que se vaya a engordar a la cárcel”
Coronel Jorge Armando Pérez Amézquita.
Según las evidencias recuperadas durante el proceso de juzgamiento, los militares prepararon el asesinato, habrían creado un grupo de chat para planificarlo y ejecutarlo, asesinaron a Dimar Torres y luego intentaron desaparecer el cuerpo. En la operación ilegal participaron desde el Coronel Amézquita, cabos y soldados que estaban cavando una fosa cuando fueron descubiertos por la comunidad.
“Hay preocupación por la seguridad de las familias, esperamos que se pueda hacer seguimiento constante. La familia está clamando justicia. Si no hay justicia, acudiremos a las jurisdicciones internacionales, al Sistema Interamericano de Derechos Humanos. Es un caso que no puede quedar impune” Diego Martínez.
La impunidad en los casos de asesinatos por parte del Ejército es preocupante y esto podría ser peor, pues el hecho de no enjuiciar a los responsables permite que los crímenes sigan siendo cometidos pues no hay castigo por esa conducta criminal, muestra de ello es que en lo que va corrido de 2022 han sido asesinado 21 excombatientes según lo registra INDEPAZ.
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