Este miércoles 22 de septiembre, la Congresista de la Unión Patriótica, Aida Avella, denunció que su oficina en las instalaciones del congreso fue violentada, pues al momento de ingresar constataron que las cerraduras habían sido dañadas, sin embargo no se ha confirmado si hay documentación o equipos que hayan sido extraídos.
Según lo denunció Avella, este tipo de ataques solamente se presentan en contra de miembros de la oposición al gobierno del Centro Democrático encabezado por Iván Duque, y es un mensaje muy preocupante que en un edificio tan vigilado como es el congreso sucedan este tipo de hechos que se configuran en agresiones directas en contra de los partidos que no hacen parte de la coalición.
Esta sería la segunda vez que suceden este tipo de agresiones en contra de las oficinas de congresistas de oposición, pues ya se había presentado una situación similar en la oficina del Senador Iván Cepeda, razón por la cual exigieron una investigación a fondo de lo que está sucediendo.
Aida Avella es una de las pocas dirigentes políticas que sobrevivieron al genocidio de la Unión Patriótica y tuvo que sufrir el exilio después de un fuerte atentado en contra de su vida en plena capital colombiana, cuando el vehículo en el que se movilizaba fue atacado por un Rocket, es decir, un arma de guerra y de alto calibre que pudo circular por la ciudad sin ningún tipo de control por parte de la Policía, y los responsables nunca fueron encontrados ni judicializados.
Esta agresión en contra de la oficina de Aida Avella se enmarca en una serie de agresiones en contra de los líderes políticos del Pacto Histórico, que fueron denunciadas por Iván Cepeda y que incluyen seguimientos, perfilamientos y montajes judiciales.
Lea también: Así opera la campaña de desprestigio contra el Pacto Histórico
